EL EJERCICIO

Con mucho entusiasmo comenzamos a ejercitarnos, tanto que vamos de compras para tener la dotación completa: licra , balaca , tenis, medias, bolsos, toallas y varios modelos, porque el entusiasmo es tal que "vamos a ir todos los días". Llegamos al gimnasio y que pasa, una serie de máquinas que no sabemos por donde comenzar, le preguntamos al instructor quien nos dice, "en que quieres concentrar el ejercicio? ", como si no se vieran todos los defectos que tenemos: la flacidez: se ve; los glúteos pequeños o grandes, caídos o no también se ven, el abdomen también, o sea que al parecer tenemos que pasar por todas esas máquinas y no solo por unos días sino muchos y con mucha preseverancia para que se vean los resultados, porque realmente se ven. Y entramos al gimnasio como primíparas con todo un atuendo de deportista (con balaca y todo) porque nos compramos todo un ajuar de gimnasia para cada día de la semana y comienza el recorrido por las máquinas a veces sin asesor...